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La noche de este sábado Irán ha lanzado un ataque con al menos 200 drones y decenas de misiles hacia algunas zonas de Israel, de los cuales varios impactaron en contra de sus objetivos.
El país persa amenazó con tomar represalias contra cualquier país que abra su espacio aéreo o disponga de su territorio para que Israel ataque. Algo que no evito que Jordania le dispusiera su cielo a las fuerzas estadounidenses e israelíes.
A su vez, Yemen también se unió a la ofensiva con el lanzamiento de varios misiles.
Por su parte Israel atacó masivamente algunos objetivos al sur del Líbano, para impedir que Hezbolá le perjudicara. Sin embargo, desde el Líbano respondieron con una andanada de misiles, para luego anunciar que el sistema de defensa aéreo israelí, denominado "cúpula de hiero", había sido destruido.
El primer ministro Israelí, Benjamín Netanyahu, anunció a Irán horas antes del ataque, que si arremetía contra su país lanzaría otro ataque, lo que provocaría una escalada mayor.
El cuerpo de la Guardia Revolucionaria Islámica informó que fue atacada la base aérea desde donde Israel realizó el ataque al consulado iraní en Damasco.
"En respuesta al crimen del régimen sionista de atacar la sección consular de la embajada iraní en Damasco, la fuerza aérea de la Guardia Revolucionaria atacó objetivos específicos en territorios del régimen sionista con docenas de drones y misiles".
En declaraciones ante la ONU, la delegación de Irán manifestó que estaban ejerciendo su derecho a la legítima defensa, a la vez que advirtió a Estados Unidos de que se mantenga al margen.
Varios misiles impactaron en una base militar en el desierto de Néguev. Y otros impactaron en la base aérea de Ramon.
Miles de Iraníes salieron de manera espontánea, a celebrar el lanzamiento de misiles por parte de su país. Mientras que desde Palestina afirman que esta fue la primera noche en seis meses, en la que no reciben un bombardeo.
